Veces en las que nuestra cabeza escoge morderse las uñas,
pero no por vicio sino porque le han encharcado,
de mentiras, insensibilidad e incoherencias.
pero no por vicio sino porque le han encharcado,
de mentiras, insensibilidad e incoherencias.
Al fin y al cabo, no importa que se marchite nuestra cabeza
si nuestro corazón ha quedado intacto
ya que las ramas secas se cortan
y sin embargo, las raíces que están podridas,
se arrancan.
si nuestro corazón ha quedado intacto
ya que las ramas secas se cortan
y sin embargo, las raíces que están podridas,
se arrancan.
Y es que,
hay que saber muy bien con qué tipo de abono vamos a cultivarnos el corazón,
con qué manos vamos a plantarlo
-pero jamás abandonarlo-
y con qué sonrisa le vamos a dar luz.
hay que saber muy bien con qué tipo de abono vamos a cultivarnos el corazón,
con qué manos vamos a plantarlo
-pero jamás abandonarlo-
y con qué sonrisa le vamos a dar luz.
Quizás,
tan solo necesitamos una voz dulce,
que sea capaz de leernos por las noches
-pero no un cuento-
arroparnos hasta el tallo
y dejarnos la lámpara encendida para asustar al monstruo que duerme bajo nuestra cama.
tan solo necesitamos una voz dulce,
que sea capaz de leernos por las noches
-pero no un cuento-
arroparnos hasta el tallo
y dejarnos la lámpara encendida para asustar al monstruo que duerme bajo nuestra cama.
Es precioso, me encanta!
ResponderEliminar